La exposición sobre el futuro de la economía argentina y de Mendoza estuvo desarrollado por los especialistas de la Fundación Mediterránea, Gustavo Reyes y Jorge Day.
El licenciado Reyes realizó un panorama sobre la economía mundial que está fuertemente marcado por el mejoramiento de la pandemia en todo el mundo, salvo por el tema de la variante Delta que ha traído problemas en algunos países.
La mejora se debe al relativo éxito de las vacunas. A pesar de ello el proceso lleva tiempo, pero está dando resultados.
Esta consecuencia en la salud tiene una repercusión muy buena en la economía y sobre cuánto va a crecer el mundo en 2021. Tanto el mundo como la mayor economía del mundo que es EEUU han acelerado sus pronósticos y hay buenas perspectivas para el 2021 y 2022. Esa es una excelente noticia.
En Argentina, los mercados de la bolsa, el valor del dólar y precios internacionales de los principales productos que se venden en el exterior comenzaron a impactar de buena forma, pero la soja y el trigo -los principales productos que exportamos- empezaron a caer.
El dólar empezó a subir y la Bolsa de valores se estancó y empezó a caer. El fenómeno común es la inflación en EEUU. Estamos hablando de un 2,3% anual, que es el índice normal para ese país y en los últimos meses aumentó al 3 o 4%. Se aceleró muchísimo.
El banco central de EEUU lo bajó, subiendo las tasas de interés para que los flujos financieros se desinflen y los capitales van a donde sube el rendimiento. Por eso el dólar empieza a volverse más fuerte y una de las consecuencias que puede presentar esta situación es que los capitales se van a EEUU desde los mercados emergentes en donde están ahora y eso genera devaluaciones.
El dólar caro hace que los precios en dólares, baje y esto afecta el precio de las comodities.
Un ejemplo de esto es lo que sucedió a fines de los 80 en nuestro país. No es el escenario más probable, pero hay que monitorearlo muy de cerca.
Cada vez que EE.UU. ha subido las tasas de interés argentina ha tenido problemas ya que afecta a nuestros precios internos y a la situación externa.
Panorama nacional
Hay que leer todas las medidas que se tomen entendiendo que el gobierno quiere llegar lo mejor posible a las elecciones: tratar de llegar con inflación lo más baja posible, el mercado cambiario lo más tranquilo posible y un nivel de actividad económica, lo mejor posible.
La emisión monetaria era altísima en plena pandemia. Empezó a desacelerarse en mayo del 2021 mucho menos que antes, el gasto publico explotó en la pandemia y viene cayendo.
La tasa de inflación crecía muy fuerte, sigue estando enorme y en los últimos tres meses ha empezado a bajar y las reservas del Banco Central llegaron a un piso de 38.000 millones y se empezó a recuperar en los últimos meses.
Los depósitos de dólares en baja hasta octubre de 2020 se están recuperando y los depósitos en pesos, pese a que las tasas son bajas, no están cayendo.
El crecimiento económico, en los últimos meses, responde a tasas anuales que están en crecimiento.
Todos estos indicadores son buenos, pero en contraparte, la confianza del consumidor cae muy fuerte y la prima de riesgo país está altísima, dentro de los países de los países de la región es de las más altas.
El precio de los bonos tras la reestructuración de los bonos del año pasado, perdieron los bonistas y les ha ido peor. ¿Qué es lo que pasa?
Respecto a hace un año con la economía cerrada se recuperó, pero desde febrero la economía dejo de crecer, se estancó, la emisión se volvió a acelerar; las reservas crecieron dado el dinero que trajo la soja, pero su precio comenzó a bajar.
La compra de dólares en el último mes se achicó, el banco Central empezó a vender dólares para frenar el contado con liqui y la tasa de inflación viene bajando porque la devaluación mensual cayó al 1% porque el Banco Central le puso freno a la devaluación. Con el freno de los precios logró un freno en el tipo de cambio.
Y el otro freno esta en el precio de las tarifas
El freno del tipo de cambio oficial y freno de las tarifas explica el freno de la inflación que a esta altura está reprimida en un 20%.
Dado que no se pueden descartar nuevos confinamientos y que hasta las elecciones se van a seguir pisando las tarifas y seguramente van a aumentar los subsidios, por la cercanía de las elecciones. Difícilmente se mantenga la baja del gasto publico y dado esto, va a tener que emitirse más dinero.
Puedo devaluar al 1% con una inflación de 4 o 5 puntos, pero por mucho tiempo, no se puede sostener.
El dólar oficial está atrasado en un 20% y este atraso cambiario y bajo valor de la soja, provoca que los dólares que revivieron la oferta, van a complicar el futuro.
Entonces si en los últimos 4 meses se frenó la reactivación de la economía; tenemos una menor inflación por atraso cambiario; el gasto público puede subir y la dinámica de las reservas se puede complicar. Esto explica la enorme desconfianza que existe en la población.
Tenemos al gobierno empujando la actividad económica por un lado y a la gente con miedo, tomando precauciones.
Para este año, se espera el aumento del 6% la actividad económica por rebote, que lamentablemente, ya se produjo en mayor parte.
La devaluación está tirada para abajo, pero dados los acuerdos salariales y la situación del comercio exterior, seguirá aumentando, la inflación alcanzará cerca del 50% (libre, será de un 60%).
El dólar oficial está más alto que el promedio histórico. Si el gobierno continúa devaluando muy poquito. A fin de año tendríamos un dólar a 92, con un valor atrasado.
Después de las elecciones, seguramente vamos a tener más devaluación que está estimado será de un 35% por ciento
Tenemos un dólar muy alto
A fin de año el Banco Central va a usar los dólares que acumuló y evitar saltos bruscos. La brecha va a seguir. El dólar sube por espasmos. pero va a seguir creciendo.
Jorge Day. ¿Qué va a pasar en Mendoza?
Vamos a centrar nuestra exposición en la potencialidad de Mendoza.
Nuestra provincia siempre fue vista con mucho potencial por recursos naturales: vino, turismo, petróleo.
Hacia lo interno es interesante para hacer negocios.
Pero hay mucha preocupación. Hacia lo interno, la economía está estancada, aun antes de la pandemia. A los comercios le cuesta mantener el nivel de ventas y en el comercio externo también tenemos problemas.
El mundo tiene mejores ingresos y esto es ideal para exportar, pero el cepo nos complica. La economía interna está estancada y la a pesar de la oportunidad, no se puede exportar.
Hay una fuerte caída de la actividad económica y recesión. Mendoza cayó por encima de los datos del país y se recupera, pero está estancada a pesar de que la economía estuvo mas abierta que en el resto del país.
Es posible que crezca, pero se recupera muy lentamente y ya ha venía anteriormente en recesión. La recuperación en Mendoza es más lenta.
Los motores para una posible reactivación serían quienes compran los productos mendocinos.
Ellos son en primer lugar
1- Los mendocinos pertenecientes al sector privado
El poder de compra que tiene la gente viene en caída desde hace tres años. Cae el poder de compra y en Mendoza el empleo cayo más en Argentina y los salarios crecieron menos, que en Argentina.
En cuanto al gasto público, en épocas de mucha expansión de los ingresos, aumentó el gasto público y Mendoza se quedó sin recursos y en la época que había que aumentarlos, el gobierno se quedo sin fondos para animar la economía.
El comercio exterior venia con tendencia en bajan y en el primer trimestre mejora y va en fuerte creciendo. Dado que estamos en una economía estancada no se pudo aprovechar el boom de los comodities.
Para describir la realidad de algunos sectores podemos decir que comparando la actividad con el mismo trimestre de 2019, no se ha alcanzado a recuperar.
Ante un mercado interno estancado es interesante destacar que exportar podría ser una buena salida, pero deberíamos tener un mejor desempeño.
Para ser breves podríamos enunciar que el Turismo está pésimo, la minería está muy mal y la agroindustria mal.
El Turismo hasta la pandemia contaba con un potencial muy grande. Los ingresos de la gente a nivel mundial iban creciendo y destinaba una gran parte a viajar. Había más gente que viajaba y gastaba más. Mendoza venia muy bien a pesar de que la economía no estaba bien.
La pandemia hizo estragos. De los vuelos de cabotaje solo no quedamos con un 25% y sin vuelos internacionales.
El turismo céntrico está muy mal. Hay cada vez menos líneas aéreas. Es sin dudas uno de los peores sectores.
El comercio es un sector muy heterogéneo: supermercados, centros comerciales, impacto de la pandemia, pero la tendencia sigue en baja. Cuesta vender.
Los autos se venden a la mitad de lo que se vendían tres o cuatro años atrás. El combustible, viene bajando.
El comercio debe enfrentar tres problemas:
El e-commerce ha significado otro competidor para el comerciante tradicional. En Argentina el comercio digital es cada vez mayor.
Las restricciones para importar: el gobierno cuida los dólares restringiendo las importaciones, es difícil conseguir productos, hay escasez y por eso los precios aumentan más, todo aumenta por encima de la inflación.
Poder de compra: estacado y en baja, cuesta vender.
Para volver a crecer hace falta que crezca la economía. Es necesario que exista un mayor PBI, después que crezcan los salarios.
En cuanto a la industria, a Mendoza le va como el país, pero tiene una recuperación más lenta. No pudimos recuperar la dinámica de los comodities
Las perspectivas son
Turismo con potencial, pero sin clientes y sin vuelos
Comercio con población más pobre, productos más caros
Industria problema de cepo sustitución de importaciones con población más pobre
Las perspectivas son
Para el corto plazo hasta fin de año
Impulso fiscal por las elecciones
Partirías salarios que aumenten más que la inflación (el costo lo paga otro)
Congelamiento de tarifas
Mercado externo
Post elecciones
Inflación
Muchas dudas
Mas cepos y controles
Duda de que haya crecimiento sostenido
Tratar de que el mercado interno no pierda tanto poder adquisitivo
Complicación del mercado externo
Largo plazo
Estamos alejados de centros de consumo
No tenemos puertos
Rodeados por estados que tiene bajos ingresos
La diferencia se logrará alentando la actividad privada
Mendoza tiene como ventaja que cuenta con buena calidad de vida
Para hacer mayor diferencia es necesario que resolvamos
La inseguridad
Trasporte
Mejores servicios, internet
Reducir los costos a los negocios o tramites e impuestos
Replanteo sobre el gasto publico
Enfrentamos un panorama conflictivo, pero Mendoza tiene oportunidades.
A mediano plazo hay tareas para hacer.